Si cerraba sus ojos aún podía sentir el calor en su piel, si escuchaba atentamente aún el sonido del agua de la vieja fuente se dejaba oír en su memoria, si aspiraba con fuerza aún olía aquel sutil aroma a rosas en la noche.....y si soñaba aún saboreaba los dátiles dulces y el sabor al té negro que tanto le gustaba a su abuelo.
Cuanto echaba de menos su tierra....sabia que no podía volver, pero aún así a veces se descubría en los muelles buscando noticias de allí, nadie que le hubiese conocido sabía donde estaba, era mejor así.
Recordaba los brazos cariñosos de su madre, la quinta esposa del Jeque Adham (el negro), señor del desierto y Jefe de las cinco tribus del norte, hombre implacable y algo pendenciero, recordaba como el era el quinto hijo que tenía y su posición en el harén como en la familia no tenía importancia, al menos no era como la situación de sus doce hermanas todas ellas ya apalabradas en matrimonio con los hijos de los jefes de las otras tribus, Arakim solo conocía el pequeño mundo de las tiendas que componían el harén...cuando su padre salia de palacio solía llevar al menos a su primera esposa y al menos a todos los hijos, pero esta vez había llevado a todas sus mujeres y a todos sus vástagos, algo se cuajaba en el encuentro de las cinco tribus.
"Arakim", llamo suavemente su madre, el niño de siete años se volvió hacia su madre, "quiero que hoy pase lo que pase estés sereno, no quiero esos arranques de ira", le miro a los ojos su madre, Mashati era hija de un comerciante persa que tras perder toda su fortuna en los caminos del desierto no pudo pagar los impuestos del Jeque y ante esta situación Mashati se ofreció como pago al Jeque, Adham no precisaba de otra mujer sin embargo la altivez de la persa y el orgullo en su mirada le prometían nuevas batallas para doblegarla, por otro lado Mashati tenía la piel tan clara como su nombre indicaba Dama de la Luna, una piel suave y aterciopelada y Adham no podía negar la atracción que sentía hacia ella, pero fue su temperamento lo que le decidió a aceptarla como esposa y como pago de su padre.
Arakim había heredado la voz suave de su madre, jamas la oyó levantar la voz sin embargo algo en su tono hacia que todos obedecieran sin discutirla aunque fuera una mujer, incluso a veces hasta su padre asentía antes sus ordenes, de su padre había heredado el temperamento burbujeante y el espíritu combativo que siempre hacia que su madre le mirara con sus ojos negros con algo de reproche.
"Madre, ¿que va ha ocurrir?", le dijo tranquilamente tomando asiento a su lado.
"Arakim, hoy saldrás del harén para no volver", el niño la miro, el ya salia durante el día y volvía para dormir, no entendía.
"Me refiero a que hoy no volverás conmigo", trato de explicar al ver la confusión en los ojos de su hijo la mujer, "hoy te asignarán tu cuarto en el palacio y comenzaras con tus estudios, así lo ha dispuesto tu padre", dijo Mashati.
Arakim medito un segundo las palabras de su madre.
"¿Porque, los demás siguen en el harén menos Abbud?", Arakim no entendía, su madre le miro ¿como explicarle que era un castigo hacia ella del Jeque?, no podía ponerle en contra de su padre cuando iba a estar solo en palacio.
"Tu padre así lo ha dispuesto y así se hará", sentencio sin dejar que el niño replicara.
Ese fue el principio de sus anhelos de libertad.
Durante los seis años siguientes solo se le permitió ver a su madre cuando esta estaba invitada a alguna cena para dar hospitalidad al resto de la familia o algún emisario de las tribus.
Arakim descubrió que su existencia no le importaba mucho a su padre, dejándolo en manos de sus maestros solo se acordaba de él cuando estos le susurraban sus quejas y él decidía sus castigos....uno de sus mayores placeres era cabalgar con su semental por el desierto, el único regalo que recibió de su padre tras cumplir los 15 años, era un hermoso ejemplar de pura sangre y aunque no era el mas veloz si era el mas resistente y en el desierto eso era mas importante que la velocidad, durante los tediosos días de estudio soñaba con cabalgar hasta la orilla del mar y allí conseguir enrolarse en un barco y salir a conocer todas esas tierras que sus maestros le mostraban, cuando cumplió los 20 años la única persona a la que realmente había amado falleció y tras el entierro de Mashati las ansias de libertad se acentuaron, comenzando a obsesionar a Arakim...sabia que allí languidecería su padre estaba formando a Abbud como su sucesor y él tenia la impresión de que estaba fuera de lugar, solía acercarse por los bazares al atardecer para oír a los viejos comerciantes hablar sobre las tierras del norte y de sus gentes, traían nuevas de guerreros fuertes como montañas, historias sobre batallas con fuegos que hacían desaparecer la oscuridad, Arakim quería ver esas tierras y saber hasta donde podría llegar en ellas.
La noche que decidió alejarse de su hogar estaban en plena celebración del nombramiento de su hermano, dejo que la noche se adentrara en la oscuridad y con el amparo de las estrellas dejo su casa a la cual no esperaba regresar.
El barco que le llevaba a las nuevas tierras se movía demasiado para su comodidad, su estomago llevaba protestando casi todo el día pero aún aguantaba....decidió que prefería salir a cubierta necesitaba algo de aire, el ambiente en el camarote era agobiante y algunos de sus compañeros estaban realmente mal.....al abrir la compuerta que le separaba de cubierta un viento frió y huracanado le recibió haciendo que su capa se alzara en el aire, con un rápido movimiento la atrapo y se la anudo con presteza, se acerco a la borda y vio como el barco parecía trotar sobre las olas, por algunos segundos quedaba suspendido antes que otra ola le recogiera y el encontronazo de la madera con el agua hacia temblar al barco, sin embargo Arakim estaba extasiado, se agarro a una de las cuerdas de sujeción y dejo que el agua salada salpicara una y otra vez su cara...una risa de simple felicidad se alzo sobre el atronador ruido del entrechocar de las olas.....Arakim se sintió libre de verdad por primera vez en su vida, sin obligaciones sin ataduras sin responsabilidades y deseo fervientemente llegar a tierra.
Cuando el barco atraco de el bajo un joven, de unos 20 años , de 1,90 , con el pelo largo y enmarañado, un pendiente en su oreja izquierda y un alfanje en el costado, con astucia miro a su alrededor, su vestimenta llamaría demasiado la atención y no quería crear desconfianza, sabia que necesitaría de la ayuda de aquellos que pudieran brindársela para conocer y vivir en aquella tierra.
Tras elegir unos pantalones de cuero negros y un chaleco del mismo color se dirigió hacia la taberna mas próxima, solo retuvo con el la capa de blanca tela que había traído consigo con la cual oculto el alfanje.
Al entrar en la cantina solo vislumbro a dos hombres enfundados en vestimentas similares y que hablaban en voz baja alrededor de dos vasos, le miraron al entrar pero apenas le prestaron atención, sin embargo Arakim prefirió no perderlos de vista.
Tras pedir al tabernero un poco de agua y algo para comer se dispuso a sentarse en una mesa situada en el rincón mas alejado de la puerta pero que le proveía de una magnifica vista de toda la taberna...no esperaba problemas pero nunca se sabia.
La taberna se fue llenando de campesinos, soldados dispuestos a gastar su paga y mozas dispuestas a divertirse, escucho las conversaciones de las mesas cercanas, al parecer aquella noche no encontraría nada interesante.....salio a la calle y comenzó a buscar un lugar donde pasar esa noche, según avanzaba entre las calles observo como dos sombras parecían seguirlo....giro en la segunda calle y se oculto en el callejón sin luz esperando a sus dos contrincantes.
"¿Donde se ha metido?", susurro a su altura uno de los hombres.
"Te lo he dicho teníamos que haberle cogido cuando hemos salido", contesto enfadado el segundo hombre.
Una vez que rebasaron su escondrijo Arakim salio del mismo para enfrentarse a ellos.
Con el alfanje como única arma de defensa se enfrento con los dos hombres.
"Extranjero!!!" una voz de mujer le llego desde atrás, "no venimos a pelear contigo por el contrario te queremos proponer algo", se volvió y la mujer le sonrió, ataviada con unos pantalones de cuero y una guerrera roja se acertó hacia Arakim con las manos levantadas y alejadas de los dos sables que llevaba colgados a su espalda.
Los dos compañeros de la mujer rodearon Arakim y se mantuvieron al lado de la mujer....
"¿Y que oferta puedes presentarme?", pregunto el joven Arakim
"Te ofrezco riquezas y libertad para hacer lo que se te antoje", dijo ella con una sonrisa.."pertenecemos a un grupo de bandidos que desean prosperar", continuo, "y creo que tu necesitas un lugar en el cual comenzar a conocer estas tierras, te brindamos nuestra protección por tu colaboración"....y así comenzó su etapa mas oscura....ingreso en la hermandad de la Calavera y la Luna,,,,saqueo, asesino y tomo todo lo que se dispuso a su mano....guerreó y aprendió el arte del asesino....se le considero uno de los miembros mas respetados y temidos....ejecuto y preparo los golpes mas llamativos y se convirtió en uno de los cabecillas del grupo....sin embargo algo es su interior le seguía diciendo que aquel no era su destino...tras diez años de propagar la muerte y el pillaje decidió que era hora de volver a cambiar de aires....¿pero como salir de aquel agujero?.
"Aquella es Cdad Arcangel....una de las fortalezas mas prosperas, esta gobernada por Remghis y no te engañes con los apodos que le dan El Benévolo, El Piadoso.....yo le he visto pelear y ese hombre es un demonio en el campo de batalla, conseguir atacar una de sus granjas es casi imposible", susurro La Carnicera a su compañero Arakim....¿sería posible que aquella fuese la ocasión?.....
El ataque fue orquestado por Ingridcool, llegaron por la noche tratando de tomar por sorpresa el poblado....pero que fue lo que desvelo al herrero Escipión...fuese lo que fuese dio la alarma y el caos se desato.....las antorchas llamearon haciendo visibles a los atacantes....las flechas cubrieron la noche como un manto protector.....los caballeros salieron de la fortaleza para proteger a su gente y a la cabeza se encontraba su señor....pero los bandidos no se iban a amedrentar habían venido a por su botín y no se los dejaría arrebatar tan fácilmente....Arakim se dispuso a defenderse del asalto de los protectores de la fortaleza....
"Mi señor no entiendo" le indico uno de los caballeros a Remghis, levantando la mano y señalando hacia Arakim indico "no ataca solo se defiende".....susurro soportando el golpe de uno de los atacantes con su escudo...
Este era el momento y el lugar...con destreza Arakim había conseguido llegar a la parte mas alejada del grupo de bandidos observando la batalla que se desarrollaba sabia que el resultado sería la desbandada de los bandidos....sin embargo no quería dejar ningún detalle al azar....mientras mantenía alejados a los pocos que ya le atacaban confirmo que sus compañeros mas peligrosos se encontraban en el centro de la batalla y sin prestarle atención....desapareció en el bosque....camino hacia su nuevo destino o al menos eso creía....
Remghis observo al hombre que desapareció en el bosque....con una señal envío a un rastreador a seguirlo no quería futuras emboscadas...la batalla se volvió mas cruda cuando los bandidos comenzaron a utilizar a los desdichados aldeanos que no consiguieron huir como escudos ante los ataques de los arqueros y los lanceros....sin embargo pronto se desperdigaron hacia el bosque....esta vez los había ahuyentado......
El señor de la fortaleza volvió al calor de esta para terminar de celebrar el nacimiento de su primer hijo.....
Arakim oyó al rastreador justo antes de sentir el lazo en su pie.....perdió su alfanje al salir despedido hacia arriba....maldijo ante su falta de precaución.
Remghis recibió al hombre que había abandonado a sus compañeros en la batalla ¿que podía esperar de él?......le observo.
"Sin empujar, que hace mucho que aprendí a andar", dijo liberándose del soldado que a empellones le metía en el gran salón, miro un segundo al señor de la fortaleza esperaba encontrar la misma expresión que su padre tomaba ante cualquier enemigo, sin embargo aquel hombre solo presentaba curiosidad y cautela, "creo que en otras circunstancias nos habríamos caído bien", pensó.
"Y bien..." miró Remghis a Arakim
"Que deseáis saber", señalo el bandido con el aplomo de su crianza ante su padre y los jefes de las tribus
Que fue lo que propicio ese encuentro quizá la diosa Fortuna, sin embargo aquellos dos hombres durante esa velada comenzaron una extraña amistad la cual permitió a Arakim dejar atrás su pasado como bandido y comenzar como un pequeño señor de la zona....durante los tres años siguientes Arakim conoció al resto de los señores y fue perdiendo su fama de bandido ante sus hazañas en las defensas con su lanza.....pero Arakim aún no había encontrado su lugar.....en una de esas escaramuzas tras socorrer a una caravana en apuros y rescatar a un pequeño de una muerte segura otro golpe de suerte le hizo llegar a Resgo1....ya no era responsable de el sino que llevaba consigo a Mithimium, trato de dejarlo al cuidado de distintas familias, pero aquel niño era mas testarudo que una mula, trato de inculcarle el miedo ante sus necesarias salidas al campo de batalla pero ese niño renació en una masacre y no le temía a nada....al final tuvo que asumir que aquel niño era suyo y que de igual manera que el lo había elegido como su padre Arakim lo eligió como hijo.....tras asentarse en Resgo1 y mantener la amistad de Remghis este le hizo otro de los muchos regalos que la vida le había brindado....su ahijada Krysis la niña de sus ojos.....recordaba sus visitas y como ella no tardaba en solicitarle que le contará sus batallas...como jugaban a guerreros los dos hermanos con Mithimium....y como terminaban reñidos porque los dos eran unos mandones....recordaba las historias contadas en la torre mientras ella jugaba a cazar pájaros....y recordaba el día que con aquellos ojos desconsolados corrió a sus brazos ante su padre muerto....las fortalezas crecieron y con ellas todos los guerreros se preciso formar alianzas y cooperar para defender el reino Arakim se hizo mayor....pero no tan mayor para no ser capaz de defender a los suyos.....y ahora se encontraba allí con aquella misiva entre sus manos....una sonrisa se asomo a sus labios...así es que este viejo aún tiene algún que otro viaje que hacer y una carcajada se le escapo ansiando libertad.
